Por: Felipe Granja (Twitter: @felipemakini)
A pesar de la insistencia de los medios colombianos en profundizar en las problemáticas de Venezuela, volcamos la mirada para hablar de lo que está pasando en el primer país de América que logró su independencia de la colonia europea, Haití. El pueblo haitiano se encuentra desde el 7 de febrero en un proceso de movilización ciudadana, que ha dejado hasta el momento nueve muertos, las protestas se dan a causa de dos factores fundamentales, según analistas políticos como Celicourt, una de ellas es el empobrecimiento sistemático al que se ha venido sometido el pueblo Haitiano y la inconformidad por la permanencia en en el poder del presidente Jovenel Moise, por otro lado está el gran descontento que dejó el descubrimiento del desfalco financiero que existía en la llamada Alianza Petrocaribe, creada precisamente para mejorar la situación de varios países caribeños entre esos Haití, teniendo en cuenta las problemáticas del pueblo haitiano que se enmarcan en el éxodo migratorio, represión estatal, ausencia de democracia y el racismo institucional.
Los movimientos y partidos de oposición siguen convocando a la movilización ciudadana, mientras que la OEA y los países como Francia, Brasil, Alemania y Canadá firmaron una carta apoyando el gobierno de Moise, algunos líderes de la ciudadanía de Puerto Príncipe, principal foco de las protestas, manifiestan que los desfalcos representan una traición a Venezuela, país con el que el pueblo de Haití ha mantenido vínculos históricos de cooperación con su gobierno.
Pancartas con avisos que dicen “Merecemos vivir como personas”, “Fuera Moise” demuestran el descontento popular de miles de Dessalines queriendo, volver a saborear el triunfo de la negritud, como en 1804, poniéndolo en palabras del poeta Martiniqueño Aime Cessarie